True Poems flee.
Emily Dickinson
Ya hace tiempo que nada lo conmueve.
Hay novedades, sí,
pero hubo noches negras de tormenta
abrazado al halógeno y también
hubo amor. Quizá el único amor. Fue
tanto que nunca supo cómo pudo
caber en una infancia tan pequeña.
Quizá es que ahora todo lo conmueve
de una forma excesiva,
pero hubo noches negras de tormenta
donde nadie mentaba la mañana.
Y hubo amor. Quizá sólo hubo ese amor,
inmenso y capturado,
hoy sueño de una infancia que lo sueña.
2 comentarios:
Sueña, sueña y no despiertes jamás en esta puta realidad...
pues si la verdad, alguna vez hubo amor o casi.
Publicar un comentario